El viernes, los futuros de acciones estadounidenses experimentaron un alza, gracias a los sólidos resultados del sector tecnológico antes de la publicación de datos cruciales sobre inflación.
Estos son algunos de los principales impulsores del mercado antes de la apertura:
- Las acciones de Alphabet (NASDAQ: GOOGL) avanzaron un 12% después de que la matriz de Google superara las expectativas de ingresos del primer trimestre y anunciara un dividendo inicial de 20 centavos por acción.
- Las acciones de Microsoft (NASDAQ: MSFT) se elevaron un 4,3% debido a la robusta demanda de productos de inteligencia artificial, lo que también contribuyó a que el gigante del software reportara ganancias en el primer trimestre por encima de lo esperado.
- Las acciones de Snap (NYSE: SNAP) se dispararon un 25% tras presentar cifras de ingresos trimestrales y datos de usuarios que superaron las expectativas.
- Por otro lado, las acciones de Intel (NASDAQ: INTC) cayeron un 8% luego de reportar ganancias trimestrales decepcionantes y ofrecer un pronóstico moderado para el segundo trimestre.
- Las acciones de Exxon (NYSE: XOM) descendieron un 1% tras no cumplir con las estimaciones de los analistas, con una caída interanual del 28% en las ganancias del primer trimestre, debido a márgenes de refinación más débiles y precios más bajos del gas natural.
- Hertz Global (NASDAQ: HTZ) registró una caída del 5,1% después de informar una pérdida trimestral mayor de lo esperado, lo que resalta sus dificultades en el negocio de alquiler de vehículos eléctricos.
- Chevron (NYSE: CVX) también experimentó una baja del 0,4% debido a los débiles precios del gas natural, aunque las ganancias del primer trimestre fueron impulsadas por mayores volúmenes de producción.
- Sin embargo, Centene (NYSE: CNC) destacó con un ascenso del 3,1% después de superar fácilmente las estimaciones de ganancias para el primer trimestre y aumentar las proyecciones para todo el año.
- Por último, las acciones de Phillips 66 (NYSE: PSX) cayeron un 5,6% tras no cumplir con las estimaciones de ganancias trimestrales, afectadas por una caída en los márgenes de refinación debido a la baja en los precios del combustible.
Este movimiento en los futuros de acciones estadounidenses refleja la atención del mercado hacia los resultados corporativos y las expectativas de inflación que están dando forma al panorama financiero actual.